Barack Osama
Nos abandona. Se marcha ya el Gran Jefe de Europa después de una intensa y (¡ay...! )breve visita. Me gustaría dejarle esta entrada a modo de agradecida despedida y la más amplia de mis protésicas sonrisas.
Me temo que me esté volviendo a hacer de nuevo un poco pro-americano (y también, porqué no decirlo,(¡ay!)pro-amariconao). Siempre lo fui,(pro americano, mucho ojovito),porque me caían simpáticos, por ser los buenos en sus películas, por su música... por su libertad. Con la adolescencia y los años me tocó vivir todo eso de que ya no molaban y tal; y es verdad, ya no molaban, sobre todo con la sarta de monigotes que lo han presidido en los últimos tiempos desde Reagan hasta la familia Bush. Hoy al fín podemos atisbar de nuevo , representado en Barack, ese espíritu e idealismo que en algún momento creímos que encarnaban de noche los yankis; y secretamente algunos aún tenemos la esperanza de que esta visita tenga el mismo valor que el que en su día tuvo la que hicieron a Normandía.
No les tengamos miedo hombre, son buena gente, son amigos y siempre han estado a nuestro lado para salvarnos. Aceptemos sus hamburguesas con educación (¡pero escondámoles el ketchup por dios!), comámonos sus activos tóxicos y flipemos juntos todos felices y de nuevo económicamente inyectados, a ver si de esta vez es verdad y evitamos que el planeta se vaya a tomar por el camino de El Saco para el 2012, como mucho!
Perdonenemé también, si es posible apelo a sus espíritus en vías de santificación, estos últimos días de desenfreno. Hoy tengo ganas de vomitar y, dado que un blog no se hace de culto hasta que habla de la náusea y puesto que voy a hacerlo quieran o no, dejenmé que aproveche y lo haga hoy onlain y con dedicatoria. Y lo perpetraré a la vieja usanza, a lo camilojosecela, con babero y orinal.
Vomitaré primero, como no, por el PP: arcadas me dan cada día que pasa comprobando sus maneras deshonestas y su miserable comportamiento; vomitaré por la caradura infinita de los Bancos y sus exponenciales comisiones y lo haré también, cómo no, por la (cara) de zampabollos que tenía el otro día Zapatero en presencia de Obama; una jeta que es cada día más una careta de mister Bean, pero con efecto tragico; una cara así sólo se explica una de dos: o por la erosión propia del poder o después de un tratamiento traicionero en Corporación Dermoestética con depilación de cejas incluída (en próximos comicios votaré a quien pene con cárcel la depilación del arco superciliar masculino)
Les dejo este video de Stephen Colbert a modo de resaca pre-pascual, ese cómico americano de tremendo éxito, en un impresionante speech en presencia de G.Bush en el que se ríe de él en sus propias narices (lo siento por los escolarizados en francés, de momento no hay subtítulos). Ole por Colbert ( "Les doy a la gente la pura verdad, sin el filtro de los argumentos racionales"),todo un descubrimiento que me temo que volverá muy pronto a visitar este blog.
Saludos y perdón por dejarlo todo hoy hecho un asco.
Me temo que me esté volviendo a hacer de nuevo un poco pro-americano (y también, porqué no decirlo,(¡ay!)pro-amariconao). Siempre lo fui,(pro americano, mucho ojovito),porque me caían simpáticos, por ser los buenos en sus películas, por su música... por su libertad. Con la adolescencia y los años me tocó vivir todo eso de que ya no molaban y tal; y es verdad, ya no molaban, sobre todo con la sarta de monigotes que lo han presidido en los últimos tiempos desde Reagan hasta la familia Bush. Hoy al fín podemos atisbar de nuevo , representado en Barack, ese espíritu e idealismo que en algún momento creímos que encarnaban de noche los yankis; y secretamente algunos aún tenemos la esperanza de que esta visita tenga el mismo valor que el que en su día tuvo la que hicieron a Normandía.
No les tengamos miedo hombre, son buena gente, son amigos y siempre han estado a nuestro lado para salvarnos. Aceptemos sus hamburguesas con educación (¡pero escondámoles el ketchup por dios!), comámonos sus activos tóxicos y flipemos juntos todos felices y de nuevo económicamente inyectados, a ver si de esta vez es verdad y evitamos que el planeta se vaya a tomar por el camino de El Saco para el 2012, como mucho!
Perdonenemé también, si es posible apelo a sus espíritus en vías de santificación, estos últimos días de desenfreno. Hoy tengo ganas de vomitar y, dado que un blog no se hace de culto hasta que habla de la náusea y puesto que voy a hacerlo quieran o no, dejenmé que aproveche y lo haga hoy onlain y con dedicatoria. Y lo perpetraré a la vieja usanza, a lo camilojosecela, con babero y orinal.
Vomitaré primero, como no, por el PP: arcadas me dan cada día que pasa comprobando sus maneras deshonestas y su miserable comportamiento; vomitaré por la caradura infinita de los Bancos y sus exponenciales comisiones y lo haré también, cómo no, por la (cara) de zampabollos que tenía el otro día Zapatero en presencia de Obama; una jeta que es cada día más una careta de mister Bean, pero con efecto tragico; una cara así sólo se explica una de dos: o por la erosión propia del poder o después de un tratamiento traicionero en Corporación Dermoestética con depilación de cejas incluída (en próximos comicios votaré a quien pene con cárcel la depilación del arco superciliar masculino)
Les dejo este video de Stephen Colbert a modo de resaca pre-pascual, ese cómico americano de tremendo éxito, en un impresionante speech en presencia de G.Bush en el que se ríe de él en sus propias narices (lo siento por los escolarizados en francés, de momento no hay subtítulos). Ole por Colbert ( "Les doy a la gente la pura verdad, sin el filtro de los argumentos racionales"),todo un descubrimiento que me temo que volverá muy pronto a visitar este blog.
Saludos y perdón por dejarlo todo hoy hecho un asco.
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