OjOVo: La Materia Prima del Caos

Aunque semos un pirata confeso, confeso también que no pensé en ningún momento utilizar este espacio virtual como un lugar dónde poder descargar libremente opiniones o frustraciones políticas, no por nada, en todo caso porque ojovo, como su nombre indica, es un huevo indiferente que gira, cuya función es sólo observar lo que le rodea y proyectarlo alegremente en unos espejos deformadores.
Pero como está visto que es imposible sustraerse a lo que te rodea, hoy nos ha pillado esta entrada en plena jornada de asimilación electoral. Si, debería instuticionalizarse esta jornada y declarse festiva también. El ciudadano, mucho más en los casos en los que se produce un vuelco, necesita por lo menos un día para esperar lo que se le viene encima. Porque en un día así se encuentra como atontado, inproductivo, ya sea por los efectos eufóricos de la victoria, como por la depresión de la derrota o por el futuro incierto que se le presenta al indeciso.
Porque dado el panorama en blanco y negro que las fuerzas vivas de nuestro país se empeñan en ofrecernos, los resultados de unas elecciones producen un efecto mental como de mudanza, en dónde los viejos esquemas han de saltar por la ventana ante la llegada de las nuevas posiciones. En fin, a mi por lo menos si baja dios con ánimo de darme otra colleja ya me coje confesao.



Le digo a un amigo que el problema de gente como yo es que nos lo tragamos todo, que todo lo interiorizamos, y que esa actitud a veces tiene consecuencias negativas para nuestra salud mental y me contesta mi colega que “si, pero al menos tu te tomas un yogur bío cada día y lo cagas todo”, y me deja tibio, pensativo, anonadao, como si hubiera votao en blanco y dirán ustedes…qué contería y yo digo: pues si.
Y bueno, para eso tengo la bitácora ¿no? ( y las pastillas): para descargar todo lo que pueda, a discreción; así que ya estoy viendo después de esta declaración a la SGAE tras mis pasos. Pués si, lo confieso, soy pirata , de Alcantarilla, y a mucha honra ¿pasa algo?



Todo es cuestión de perspectiva porque, vamos a ver, los artistas mucho hablar y mucho hacer conciertos para apoyar causas nobles, pero cuando se trata de dar de comer a un montón de gente que lo puede hacer gracias a el producto de su actividad, ahí si que ya no somos tan artistas ¿no? ¿No quieren ayudar de verdad al mundo y cambiarlo y todo eso? ¡Pues "todos para uno y uno para todos"! ¿O es que de lo que se trata es, una vez más, de no poder soportar la visión del enorme cacho de pastel como alejándose, repartiéndo planetariamente entre los que me hicieron rico?



Y mucho más ahora, con vacas flacas, dile tu a mengano que no se saque unos euros con los cds de Demis Roussos , por decir algo, le va a importar a fulano si al creador del baile de las mariposas no le llegan los dracmas a fin de mes. Que se los pida a su compañía discográfica o que reeedite el “we shall dance” a ritmo de trance con el Audacity como hacemos todos. Estamos en tiempo de cambio , y diría más ( como buen Fernández que soy): son tiempos de inter-cambio. De trueque, de trileros, de mercadillo, de reparación y de donación. Hay que desprenderse ya de los porches de las casas y de los maseratis hombre, que podemos ir perfectamente a comprar el periódico andando o despedirnos con un beso ántes de salir de casa.
Así que, a ver si es verdad, y entre todos y estos politiquillos que nos interpretan ponemos nuestra semillita de oro y conseguimos que Espeñe sea por una vez, de nuevo, una donación.