Tocando La Gaita



Que nada, que no hay manera oyess, que está visto que lo de la bitácora no es para mí, que yo jamás mantuve una con regularidad, que no soy de diarios, ni en la infancia, si acaso un recuento de goles, eso si, pichichi como soy, pero vamos, no sé para que me he metido en esto pero en fín, ahora ya por dignidad voy a escribir unas letras aunque me sude la sangre...
Para colmo tenía un par de cosas apuntadas por aquí, y las he perdido, qué desastre. De pronto me había animado, si, con el aliciente de comprobar si me convertiría en el único blogger de la red que no ha tenido nunca una entrada; seguro que hay estadísticas en internet sobre páginas que se escriben una primera vez y luego se olvidan para siempre; pues bien, al menos ser el campeón en eso.
Hoy ha entrado Manuel, pero bueno, el es amigo y como que no cuenta. He visto un chiste gráfico muy bueno de un tipo que le dice a otro: "No tengo absolutamente nada que decir" y este le contesta: ¿"No has pensado en hacer un blog y contarlo?". Pués algo así. Que no es mi caso. Tengo mucho que contar. Pero me disperso, mis protones vagan asus anchas por los espacios siderales cotidianos y pican aquí, tropiezan allá, rebotán paquí y, como protones que son y muy cuánticos ellos, están y no están al mismo tiempo, algo que es fatal para un artista como OjOVo.
Prepararse, si me quereis, prepararse, porque el desborde creativo que os espera superará cualquier desborde de cualquier tipo que podais haber visto en vuestra vida. Dejo una muestra de mis...ejem... posibilidades... en la foto. Saludos.